Nissan quiere incrementar sus ventas en un millón de unidades

La marca japonesa Nissan ha dado a conocer su nueva estrategia de crecimiento en los próximos tres años bautizada como ARC y cuyo objetivo es incrementar la venta de vehículos electrificados y recuperar el crecimiento después de años de caída de ventas. Para ello, Nissan se plantea un incremento de un millón de unidades de sus ventas mundiales y una apuesta por las baterías de fosfato de hierro y litio y de estado sólido que contribuyan a reducir los costes de los vehículos eléctricos de batería de próxima generación en un 30 por ciento, posibilitando así el incremento de ventas de este tipo de automóviles.

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Este ahorro de un 30 por ciento en la producción de eléctricos debería permitir a Nissan alcanzar la paridad de costos entre los vehículos eléctricos y los vehículos de combustión interna en el año 2030. Para incrementar las ventas de eléctricos, la marca planea aumentar su capacidad de producción de baterías hasta 135 gWg de capacidad global en todo el mundo y lanzar 30 nuevos modelos en los próximos tres años, 16 de ellos electrificados y 14 de combustión interna.

Nissan ha anunciado una inversión de más de 400.000 millones de yenes (unos 2.700 millones de euros) en aumentar su capacidad de producción de baterías para poder construir 1,35 millones de vehículos eléctricos a finales de esta década. Este nuevo plan ARC promovido por el CEO de la marca Makoto Uchida sustituye al plan NEXT que quería conseguir un beneficio operativo por encima del 5% (en 2023 se quedó cerca, con el 4,8%) y, sobre todo, unas ventas mundiales de 5,38 millones a las que no se ha llegado ni mucho menos ya que la marca Nissan vende en la actualidad dos millones menos de lo previsto, uno de los cuales debe recuperarse con el nuevo plan.

Uchida explicó en la presentación del plan que "Nissan debe cambiar la forma en que planifica, desarrolla, fabrica y vende coches introduciendo cambios radicales para convertirse en una empresa rentable” y añadió que “Nuestro objetivo es recuperar el volumen e impulsar las ganancias". Nissan buscará un beneficio operativo superior al 6% en el año fiscal 2026-2027.

Para alcanzar ese millón de ventas adicionales, la empresa pretende lanzar en Europa seis nuevos modelos que permitan alcanzar un mix del 40% de ventas de modelos eléctricos en 2027 (el primero debe ser el nuevo Micra sobre la plataforma del Renault 5). La marca pretende también lanzar en Europa la tecnología e-Power de tercera generación, más eficiente que la actual e incrementar su capacidad de producción de baterías hasta 25 gWh de capacidad.

En Estados Unidos, uno de sus principales mercados, Nissan quiere empezar a vender tanto la tecnología e-power como una gama de modelos híbridos enchufables mientras que en China pretende no solo elevar sus ventas de eléctricos de 200.000 a un millón, sino empezar a exportar vehículos fabricados allí con un objetivo inicial de 100.000 coches exportados anuales. Nissan quiere que sus ventas de eléctricos en Japón pasen de 90.000 a 600.000 coches electrificando el 70% de la gama japonesa y afirma que completará su expansión prevista con el lanzamiento de tres nuevos modelos en la India.

Las ventas globales de vehículos eléctricos de Nissan alcanzaron un tope de 146.300 vehículos en todo el mundo en 2022 y bajaron a 138.500 en 2023 mientras que la producción de vehículos híbridos con tecnología e-Power siguió el camino inverso con un total de 381.800 fabricados en 2023, 150.000 más que el año anterior. El éxito de los e-Power debe permitir que la marca alcance un 60 por ciento de ventas de vehículos electrificados a 31 de marzo de 2031.

Por otra parte, la compañía japonesa ha adquirido a Renault un 2,51% de su propio capital, lo que supone más de 100 millones de acciones de los 280 millones que Renault le había ofrecido. La marca francesa deberá decidir ahora si conserva o si vende a terceros el resto de las acciones ofrecidas. Nissan ha pagado por recuperar un 2,51% de su capital un total de casi 60.000 millones de yenes (unos 370 millones de euros).

Esta recuperación de capital estaba ya pactada con Renault en el marco de la Alianza que mantienen ambos grupos industriales y que prevé que, en los próximos años, ambas compañías cedan parte de su participación en la otra. Sin que este intercambio suponga que se rompa la colaboración entre ambas empresas, no deja de ser curioso que se produzca en un momento en el que Nissan ha acercado posturas con Honda de cara a posibles colaboraciones tecnológicas tanto en el ámbito de la electrificación como en el de la movilidad inteligente.